Consejos para ayudar a evitar el fraude y el abuso en la atención médica

• Personas que llaman o que se identifican con cualquiera de las siguientes funciones:

            "Representante de atención médica" 

            "Representante del gobierno"

            "Asesor de seguros de salud"

• Representantes o personas que llaman y se identifican como "Medicare"

Consejo: Medicare no realiza llamadas telefónicas no solicitadas. La mejor manera de evitar las llamadas no solicitadas es registrar tu número en la lista federal "No llamar". Puedes hacerlo comunicándote al 1-888-382-1222 desde el número de teléfono que deseas registrar o en línea, en www.donotcall.gov

• Llamadas automáticas: te solicitan que pulses cualquier tecla para comunicarte con un agente
• Planes médicos con descuento que simulan ser seguros de salud
• Representantes a domicilio o en eventos públicos

Consejo: Ten cuidado con las estafas de ADN, en las que los estafadores pueden acercarse a ti ofreciéndote hisopados bucales para pruebas genéticas. 

• Comerciales de TV que anuncian artículos de atención médica "gratuitos"
• Representantes o anuncios que ofrecen tarjetas de regalo, teléfonos, etc.
• Profesionales de la atención médica que acuden a tu domicilio sin solicitar ni programar cita previa

A continuación, se muestran algunas formas en las que puedes tener precaución cuando hablas por teléfono.

• Utiliza un identificador de llamadas y evita contestar llamadas de números desconocidos
• Si atiendes una llamada, pregunta quién es, por qué llama y desde dónde llama
• Sé cortés, pero firme con respuestas, como las siguientes:

Por favor, agréguenme en la lista de "No llamar"

No me interesa, gracias

• No les proporciones ningún dato personal
• Si la cortesía no funciona, puedes colgar el teléfono
• Comunícate con tu operador telefónico para bloquear llamadas automáticas o de venta telefónica
• Mantente especialmente alerta. Los vendedores telefónicos suelen llamar a los beneficiarios de Medicare y Medicaid.

Cuando consultas o administras información en línea, es importante seguir estos pasos:

• Después de consultas información personal de salud o financiera en un sitio web, cierra sesión en el sitio o cierra tu navegador
• Nunca accedas a información personal de salud o financiera en una red wifi pública, como en una cafetería, una biblioteca pública o una computadora pública
• Utiliza un nombre de usuario y contraseña únicos para cada una de tus cuentas
• No utilices la misma contraseña para varias cuentas
• Actualiza tu contraseña de forma periódica
• Mantén actualizados los parches de seguridad y el software antivirus en tu computadora personal
• No hagas clic en publicidades emergentes
• Haz una búsqueda de las estafas más recientes (algunas están dirigidas, en especial, a las personas mayores). Infórmate y sé cauteloso

Seguir estas recomendaciones puede ayudarte a mantener tu información personal más segura.

• Trata tu tarjeta de seguro como lo harías con una tarjeta de crédito
• Nunca proporciones información personal, como el número de identificación de tu plan de salud, el número de la tarjeta de crédito o débito (u otra información personal) en una llamada telefónica que no hayas iniciado
• No envíes información de la tarjeta de débito u otra información personal por correo electrónico
• Elige un PIN que no aparezca en tu cartera (por ejemplo, no uses tu fecha de nacimiento ni tu número de teléfono)
• Tritura los documentos financieros antes de desecharlos
• Controla tus cuentas financieras con regularidad
• No permitas que ninguna persona, excepto en el consultorio de tu médico o la farmacia, manipule tu tarjeta de identificación de miembro o de Medicare. Si alguna persona solicita tu información personal, no se la proporciones.
• Nunca aceptes equipos ni servicios médicos "gratuitos" a cambio de tu número de identificación de miembro o de Medicare

Mantente alerta a este tipo de inexactitudes sospechosas en la información y los registros de salud.

• Visitas al consultorio o de telesalud que no ocurrieron
• Servicios de salud que nunca recibiste
• Facturación de proveedores que no conoces
• Facturación por un servicio más amplio que el prestado 
• Facturación duplicada por servicios idénticos
• Fechas de servicio que difieren de tus registros
• Facturación de suministros o dispositivos que no solicitaste ni recibiste
• Facturación de suministros o dispositivos que te dijeron que serían gratuitos o sin costo
• Si adviertes alguna discrepancia, notifica a tu compañía de seguros de inmediato