5 preguntas para hacer antes de una mamografía
A menudo, pensamos en el cáncer de mama cuando escuchamos la palabra "mamografía". Sin embargo, una mamografía es simplemente una radiografía de las mamas para verificar si estas estén sanas. Estas radiografías pueden detectar signos de cáncer de mama u otras afecciones mamarias que no se pueden ver ni sentir.1
Probablemente, hayas leído artículos sobre mamografías o hayas escuchado historias de amigos o familiares que se las hayan realizado y, tal vez, ahora estés lista para realizarte una. Sigue leyendo para saber qué preguntas debes hacerle a tu médico, cómo ayudarlo a prepararse para la visita y qué esperar de la mamografía.
Habla con el médico sobre cuándo realizarte la mamografía
Cuando se trata de salud preventiva, puede que no exista el término "demasiado pronto", en especial, cuando hablamos de detectar el cáncer. Puede que no sea uno de los temas favoritos para hablar, pero el médico te ayudará a sentirte cómoda y escuchada. Ya sea que estés lista para programar tu primera mamografía o que aún falten algunos años, estas son 5 preguntas que puedes realizar para iniciar la conversación cuando te sientas lista.
Cuando cumplas 40, puedes optar por hacerte mamografías de detección anuales hasta que cumplas 44. Las pautas de la Sociedad Americana contra el Cáncer recomiendan que las mujeres de 45 a 54 años se realicen mamografías anuales, sin lugar a dudas. Cuando cumplas 55 (y si has tenido una buena salud mamaria), el médico podría indicarte que te realices una cada dos años.2
Si corres mayor riesgo de padecer cáncer de mama, es posible que debas comenzar antes de los 40. Asegúrate de informar a tu médico si tienes alguno de estos factores de riesgo3:
- Antecedentes personales de cáncer de mama o afecciones mamarias no cancerosas (es posible que necesites hacerte mamografías de diagnóstico en lugar de mamografías de detección)
- Antecedentes familiares de cáncer de mama o de ovario
- Radioterapia previa en el pecho
- Antecedentes de medicamentos hormonales (como anticonceptivos o terapia de reemplazo hormonal)
- Mamas densas
El proceso de cada mujer con la salud de las mamas es diferente. Asegúrate de tener una conversación abierta y honesta con el médico sobre tu historia clínica, tus factores de riesgo y cualquier inquietud personal.
Con cualquier tipo de prueba de detección o tratamiento, es importante evaluar los pros y los contras. Las mamografías no son muy diferentes. Algunas personas pueden preocuparse por la exposición a la radiación, pero las mamografías solo implican una pequeña cantidad de radiación, incluso menos que una radiografía. La dosis es lo suficientemente baja como para que los beneficios de las pruebas de detección periódicas sopesen cualquier posible problema relacionado con la radiación. Desde luego, habla con tu médico si tienes dudas.4
Es una buena pregunta para hacer. Asegúrate de que las mamografías que te realices sean eficaces y valgan la pena. En este momento, los CDC afirman que las mamografías son el mejor tipo de prueba de detección que tenemos, pero no son perfectas. 5Es bueno saber qué limitaciones existen, para poder hacer las preguntas correctas a lo largo de tu camino hacia una buena salud, por ejemplo, "¿Podría ser un falso positivo?" o "¿Es realmente necesario ese tratamiento?".6
- Resultados falsos negativos: por ejemplo, el tejido canceroso podría confundirse con el tejido mamario denso normal. Por desgracia, las mamografías de detección pasan por alto aproximadamente 1 de cada 5 cánceres.7
- Resultados falsos positivos: pensar que tienes cáncer puede causar ansiedad y, a menudo, puede llevar a realizar otras pruebas que no son necesarias.
- Sobrediagnóstico o sobretratamiento: las mamografías ayudan a detectar el cáncer, ya sea un tipo que requiera tratamiento o no (en realidad, algunos cánceres no representan una amenaza). El problema es que los médicos no siempre saben qué cánceres pueden poner en peligro la vida, por lo que la apuesta más segura puede ser tratar cualquier cáncer que se encuentre. Un sobretratamiento del cáncer puede exponerte a efectos secundarios del tratamiento cuando los profesionales médicos consideran que no es necesario.
Recuerda, es tu cuerpo y puedes hacer todas las preguntas que quieras para sentirte cómoda.
Las mamografías no son las pruebas más placenteras del mundo. Sin embargo, puede ser reconfortante saber que estás enfrentando la incomodidad por el bien de tu salud en general. Durante la prueba de detección, las mamas descansan, por turnos, sobre una plataforma, y se les aplica una presión suave. Solo dura unos segundos para que la máquina de rayos X pueda extender el tejido mamario y tomar la mejor imagen. Esta presión minimiza la dosis de radiación necesaria. Es posible que sientas algunas molestias. Si sientes mucho dolor, avísale al técnico para que aplique menos presión si es posible.8
Según tu salud personal y tu historia clínica, el médico te recomendará la mamografía indicada.9,10
- Mamografía de detección: esta es la prueba estándar si es medio el riesgo de padecer cáncer de mama sin signos o síntomas evidentes de una afección mamaria. Si programas una mamografía de rutina como prueba de detección preventiva, este puede ser el tipo de mamografía que te realizarás.
- Mamografía de diagnóstico: si te has realizado una mamografía de detección anormal o presentas signos de una posible afección mamaria (como un bulto, dolor, secreción, engrosamiento de la piel de las mamas o cambios en la forma o el tamaño de estas), es probable que te hagan una mamografía de diagnóstico. El médico también podría solicitarla por cualquier circunstancia especial, por ejemplo, si tienes implantes mamarios. Muchos implantes dificultan ver cada parte del tejido mamario, por lo que es posible que se necesiten más imágenes para obtener una imagen completa. Este tipo de mamografía puede proporcionar una radiografía más detallada que una mamografía de detección y puede tardar un poco más, así que asegúrate de planificar en consecuencia.
- Mamografía 3D: Esta opción proporciona una imagen más clara del tejido mamario en comparación con una mamografía de detección 2D estándar. Este tipo de mamografía puede combinar múltiples rayos X para crear una imagen tridimensional de las mamas. Puede ser la mejor opción si tienes mamas densas porque tanto el tejido denso como el tejido canceroso aparecen blancos en una mamografía estándar. Por lo tanto, puede resultar difícil diferenciar entre tejido mamario normal y tejido anormal (posiblemente canceroso). Por este motivo, el resultado podría ser un falso negativo. La imagen 3D permite a los médicos ver algo más que la densidad, lo que puede brindar un diagnóstico más preciso. Al igual que una mamografía de diagnóstico, este tipo de mamografías también podría ser una buena opción si tienes implantes mamarios.
Dicho esto, no existe una mamografía correcta o incorrecta. Habla con tu médico sobre cuál podría ser el mejor para ti.
Cómo prepararse para una mamografía
Debes tener en cuenta varias cuestiones para programar y asistir a la cita de tu mamografía. Primero, asegúrate de elegir un centro de mamografía certificado por la FDA. Es decir, puedes contar con que ese centro cumple ciertos estándares.11
Esta es una lista de verificación rápida para ese día, sin importar qué tipo de mamografía te realices.12,13
- Mamas firmes. Tu cita debe ser el día en el que sea menos probable que las mamas estén sensibles. Por lo general, debe ser la semana después de tener el período o en cualquier momento después de la menopausia.
- Cualquier imagen de mamografía anterior. Si visitas una clínica nueva, solicita a tu clínica anterior que te envíe registros de imágenes de mamografía anteriores para que el radiólogo pueda compararlas con las nuevas.
- No te duches ni uses desodorante. Las partículas metálicas de cualquier tipo de antitranspirante, jabón o loción pueden aparecer en las radiografías y causar confusión. Si es mejor para ti, es posible que desees considerar una cita temprano en la mañana para poder ducharte inmediatamente después de terminar.
- Habla con franqueza. Informa al técnico todo lo que creas importante. Por ejemplo, si estás embarazada (o crees que podrías estarlo) o si tienes implantes mamarios. Mejor aún, menciónalo cuando llames para programar la cita.
¿Dónde me puedo realizar una mamografía?
¿Sabías que no necesitas una derivación ni una autorización del médico para programar una mamografía? Cuando cumplas 40, busca un centro de mamografías y reserva una fecha para una radiografía. La mayoría de los seguros cubren las mamografías de detección preventivas a partir de los 40 años. No incluye mamografías 3D ni de diagnóstico. Es probable que debas pagar un copago o coseguro, según tu plan de salud. Inicia sesión en la cuenta de tu plan de salud para consultar tus beneficios y conocer la cobertura de tu plan para este tipo de prueba de detección.