¿Cuándo es el momento de contratar un cuidador domiciliario?

Muchas personas tienen un ser querido que necesita atención médica domiciliaria o podría necesitarla en el futuro. Informarse sobre las opciones de cuidado domiciliario puede ayudar a afrontar las responsabilidades y recompensas de este trabajo, ya sea que lo hagas tú mismo o contrates a otra persona.

¿Qué hace un cuidador domiciliario?

Cualquier persona que cuide a un ser querido enfermo o herido en su hogar podría considerarse un cuidador domiciliario. Pero ¿cuáles son los beneficios de un profesional al que se le paga por brindar atención domiciliaria? Veamos de qué manera un cuidador domiciliario puede mantener la salud y el bienestar del paciente.

Los cuidadores, remunerados o no, ayudan a una persona a gestionar cuestiones, como las actividades de la vida diaria (ADL, por sus siglas en inglés). Estas son actividades que alguien suele hacer por sí mismo, como ducharse, vestirse o comer. La salud física y mental de una persona puede afectar su capacidad para realizar estas tareas por sí misma. Por ejemplo, una persona con demencia puede necesitar más asistencia con sus ADL que una persona mayor con simples limitaciones de movilidad.

Independientemente del nivel de asistencia necesaria, los cuidadores domiciliarios pueden ayudar con muchas ADL diferentes y otras necesidades, como las siguientes:

  • Vestirse, bañarse y mantener la higiene
  • Comprar comestibles, preparar comida y cocinar
  • Administrar medicamentos y ayudar con equipos médicos
  • Coordinar citas médicas
  • Realizar quehaceres domésticos
  • Trasladarse

Diferencia entre la atención médica domiciliaria y la atención personal y compañía

Si brindas atención médica domiciliaria a un ser querido, puedes terminar desempeñando muchas funciones diferentes de todo el espectro de atención que se necesita (física, mental, social y emocional). Los cuidadores domiciliarios certificados son personas que han realizado cursos especiales para capacitarse en el cuidado de personas. Reciben educación sobre aspectos, como los derechos de los pacientes, el mantenimiento de registros, los signos vitales, la nutrición, la gestión de riesgos y más. Pueden alivianar la carga y asumir muchas tareas cotidianas, como las ADL.

Es importante que seas honesto contigo mismo cuando necesites ayuda adicional para evitar el desgaste del cuidador. Si decides que es hora de contratar ayuda, pídele al médico de tu ser querido que te recomiende dónde encontrar cuidadores domiciliarios certificados.

¿Cuáles son los beneficios y desafíos de la atención médica domiciliaria?

Cuando la atención domiciliaria funciona bien, puede haber muchos beneficios. Las personas que son atendidas en su propia casa se sienten más independientes. Al permanecer en un entorno que les resulta cómodo, seguro y tranquilo, es posible que se sientan menos solas o aisladas. También puede haber ventajas para ti. Si puedes contratar a un cuidador domiciliario certificado, es posible que tengas más tiempo para pasar con tu ser querido para realizar actividades juntos, como leer en voz alta o escuchar música. Además, aprenderás más sobre la atención médica en general y cosas nuevas y específicas que puedes hacer por tu ser querido.

Si bien puede que no sea agradable pensar en las posibles desventajas de ser cuidador, la concientización es una forma importante de empoderarse. Al saber qué desafíos podrías enfrentar, estarás mejor preparado para el futuro, ya que podrás comunicar tus necesidades, establecer límites y aprovechar los muchos recursos disponibles para ti y tu ser querido.

Cuidar a un amigo o familiar puede ser gratificante, pero también estresante y emocionalmente agotador. Puede afectar las relaciones. También puede parecer injusto que hagas tú el trabajo si tienes otros familiares cercanos que esperabas que te ayudaran, pero no intervienen cuando necesitas apoyo. A veces, puedes sentirte desvalorado si la persona a quien cuidas no te da las gracias o no se comunica bien. Y es posible que otras personas en tu vida no comprendan o no apoyen tu compromiso de cuidado.

Los cuidadores también pueden enfrentar dificultades económicas si comienzan a gastar su propio dinero en alimentos, equipos médicos u otros artículos necesarios para la atención, lo que es especialmente cierto si tu función de cuidador requiere que reduzcas tus horas de trabajo. 

¿Quién paga por la atención médica domiciliaria?

Los programas gubernamentales, como Medicare, Medicaid y los beneficios de la Administración de Veteranos (VA, por sus siglas en inglés), pueden cubrir parte o toda la atención médica domiciliaria clínicamente necesaria para los pacientes que cumplen con ciertos requisitos. Es importante saber qué servicios están cubiertos y qué servicios pueden tener costos de bolsillo.

Un seguro privado, como un plan de salud individual o familiar que se obtiene a través de un empleador o de un plan de salud ACA, puede brindar cierta cobertura de atención médica especializada, pero estos planes no suelen cubrir la atención personal. Lo mejor es consultar los detalles del plan o llamar a la compañía de seguros para asegurarse de comprender los beneficios de la atención médica domiciliaria.

Si el seguro no cubre la atención médica domiciliaria, puedes contratar a un proveedor de atención domiciliaria y pagar los servicios de tu bolsillo. Asegúrate de comparar precios y costos porque estos servicios pueden ser costosos. O bien, comunícate con tu agencia local de servicios sociales o sus oficinas locales para personas mayores para verificar si tu ser querido califica para recibir asistencia económica.1

¿Dónde puedo encontrar recursos para cuidadores?

Hay muchos recursos disponibles para ayudar a los cuidadores. Estos son algunos:

  • Recursos públicos y gubernamentales. Busca en los sitios web de tu condado y tu estado (prueba con un término, como "servicios para personas mayores"). Puedes encontrar recursos para ayudar a las personas mayores a ser lo más independientes posible, por ejemplo, información sobre la planificación de apoyo y los programas comunitarios.
  • Atención de relevo. Probablemente, necesites descansos en tu labor de cuidado. Si no tienes una red de amigos o familiares dispuestos a ayudar, puede visitar archrespite.org para encontrar proveedores y programas de relevo en tu área.
  • Servicios de envío. Ya sean medicamentos, artículos para el hogar o servicios de entrega de alimentos, es posible que te sorprendas de lo que puedes recibir directamente en tu puerta. 
Descubre más recursos para cuidadores

¿La atención domiciliaria es lo indicado en tu caso?

La decisión de brindar atención domiciliaria a un amigo o familiar es personal y depende de tu situación específica. Si la persona que necesita atención puede permanecer estable, segura y protegida en su hogar, y si tú tienes el tiempo y los recursos para brindar esa atención, podría ser una opción que valga la pena.

Antes de comprometerte a ser cuidador, habla con amigos y familiares. Habla sobre las preferencias y expectativas con la persona a la que cuidarías. Obtén la opinión de su equipo médico y avanza de la manera que mejor funcione, según las circunstancias.

Si decides convertirte en cuidador domiciliario, recuerda que habrá altibajos, idas y vueltas, y obstáculos inesperados en el camino. Toma las cosas día a día. Acepta ayuda cuando te la ofrezcan y cuídate para tener el combustible necesario para recorrer el camino que te espera.